La Silla de Pensar

Es difícil pensar que haces las cosas bien cuando a tu alrededor todo el mundo se queja de lo que haces. Esté bien o mal, la cuestión es quejarse. Cuando ves que a tu alrededor todo se tuerce y nada te sale como tú quieres que te salga, sino todo lo contrario. Cuando más deseas algo, en el momento en el que casi lo tienes, se escapa, o más bien lo dejas escapar. Miedo tal vez, no está muy definido la sensación de no querer en el fondo acercarte a ello, miedo a quemarte si te aproximas mucho, como Ícaro y sus alas de cera, miedo a precipitarme al suelo desde tan alto.
A veces me gusta asumir riesgos, pero esto no es igual, cuando se trata de este tema no ocurre lo mismo. Cobarde, quizá, me encierro en el "y si..." y no me arriesgo si ese "y si..." es cierto. Y por ello se queda ahí, como un sueño, algo inalcanzable, como el Sol.